Precisión

Algunos profesores algunas veces y de vez en cuando castigaban mi falta de precisión. A pesar de ciertos intentos por mi parte, nunca he podido superarlo: cuando alguien me preguntaba si por casualidad me habría gustado ir a algun lugar sin concretar, yo siempre respondía claro que por supuesto que desde luego que no cabe duda de que definitiva y seguramente quizá.